Con el brillante cierre del curso “Las crisis económicas en la historia de España” a cargo del economista Guillermo de la Dehesa el pasado viernes 2 de septiembre se clausuró el II Aula de Banca, fruto de la colaboración entre la Universidad de Cantabria, la Universidad Internacional Menéndez Pelayo y la Fundación UCEIF.
Desarrollada en el marco de los “Veranos Excelentes” que promueve Cantabria Campus Internacional y la colaboración del Banco Santander, esta segunda edición del Aula de Banca contó con tres cursos monográficos centrados en el análisis de la crisis económica. El primero de ellos, celebrado entre el 7 y el 8 de julio con la colaboración de la Secretaría General Iberoamericana, se desarrolló bajo el título “La financiación de las pymes en América Latina en el entorno poscrisis” y contó con la participación de importantes figuras del ámbito económico centro y suramericano pertenecientes al Banco Mundial, la División América del Banco Santander, el Banco Interamericano de Desarrollo, el Center for Global Research, la Corporación Andina de Fomento, Universidad Politécnica de Cartagena y, en España, la Escuela de Negocios de Caixanova Galicia.
Entre el 19 y el 21 de julio tuvo lugar el curso titulado “La crisis financiera y la recuperación económica mundial: nuevas perspectivas”, dirigido por el catedrático de sociología Mauro F. Guillén, del Joseph H. Lauder Institute y la Wharton School de la Universidad de Pensilvania. Junto con Guillén, destacados profesionales del Colegio de Economistas, la Temple University, la IE Business School, la propia Universidad de Pensilvania y José Luis Gómez Alciturri como Director General de Recursos Humanos del Banco Santander, llevaron a cabo un riguroso acercamiento a las cuestiones más sobresalientes de la presente crisis en un marco internacional, con especial énfasis en el análisis comparativo de las economías estadounidense, británica, alemana y, por supuesto, española.
El tercer y último curso, organizado desde el Archivo Histórico Banco Santander, ha pretendido aportar una visión útil desde el ámbito de la Historia al estudio y los problemas derivados de las crisis económicas, sin caer en el presentismo, pero sin olvidar que los problemas del presente estimulan y posicionan al historiador en el estudio del pasado para comprender su propia realidad contemporánea y poder aportar soluciones a los retos actuales. Con esta perspectiva, el catedrático emérito de la Universidad Pompeu Fabra, Josep Fontana, hizo un repaso por tres momentos de crisis especialmente importantes para comprender la historia de España: la iniciada a finales del siglo XVI, que se prolongaría durante el siglo XVII; la denominada crisis del Antiguo Régimen que se iniciaría a finales del siglo XVIII y, por último, la crisis de los años 1930 que desembocó en la Guerra Civil Española. Puntos esenciales los tres para analizar el momento presente y explicarlo como la crisis de una sociedad y la crisis del Estado.
Por su parte, Antoni Furió, de la Universidad de Valencia, se refirió a la crisis bajomedieval revisando los clichés más extendidos sobre el papel esencial de la epidemia de peste negra iniciada en 1348 y mostrando un panorama económica y demográficamente muy diverso atendiendo a las distintas áreas geográficas estudiadas, más allá de algunas regiones de Francia o Italia ya bien conocidas. Bartolomé Yun, del European University Institute (Florencia) desarrolló un interesante ejercicio histórico para el período moderno, indagando, lejos de la receta mimética o la comparación literal, en aquellos aspectos de la crisis del siglo XVII que pueden arrojar luz sobre el momento actual y, a la inversa, aquellas facetas de la situación presente que pueden ayudar a los historiadores a comprender mejor la coyuntura depresiva de hacer cuatrocientos años.
La sesión del 1 de septiembre se abrió con la intervención de Enrique Llopis, de la Universidad Complutense de Madrid, quien abordó la denominada crisis del Antiguo Régimen, un período que, más allá de la turbulencia política y social, presentó un carácter doble: por un lado, los años comprendidos aproximadamente entre 1790 y 1815, de retroceso económico evidente por la crisis de las estructuras económicas y políticas propias de un régimen agonizante; y, por otro, entre 1815 y 1850, cuando el país inicia uno de los períodos de crecimiento económico más brillantes de la historia de España. Por la tarde, el profesor Carles Sudrià, de la Universidad de Barcelona, reflexionó sobre una de las crisis más profundas y determinantes del siglo XIX español y una de las que presentó un carácter más netamente nacional: la crisis de la década de 1860. Tras los análisis ya canónicos de Sánchez Albornoz y Tortella, Sudrià justificó la necesidad de revisitar este período de profunda depresión que marcó la configuración del sistema financiero español en la segunda mitad del ochocientos y que presenta inquietantes paralelismos con la crisis presente.
Por la tarde, Jordi Maluquer de Motes, de la Universidad Autónoma de Barcelona, abordó el carácter esquivo de la crisis finisecular y las consecuencias de la pérdida colonial de 1898. Una crisis a menudo poco visible en las estadísticas oficiales pero sin duda de una profunda gravedad que, no obstante, dejó paso hacia 1899 a un período de gran crecimiento económico hasta enlazar con el auge exportador español durante la Primera Guerra Mundial. A continuación, Jordi Palafox, de la Universidad de Valencia, ofreció una visión sobre la crisis contemporánea por excelencia, la que más comparaciones ha motivado por parte de académicos, políticos y periodistas: la Gran Depresión iniciada en octubre de 1929, poniendo un especial interés en sus efectos sobre el desarrollo económico español y deslindando aquellos aspectos que unen y separan aquel episodio de crisis especialmente catastrófica con la situación presente.
El día 2 de septiembre, en el Salón de Baile del Palacio de La Magdalena, el profesor Carlos Barciela, de la Universidad de Alicante, dirigió una mirada al particular desenvolvimiento, a menudo raquítico o, en cualquier caso, por debajo de su potencial, de la economía española en los años de la dictadura del General Franco, especialmente por contraste con la creación y desarrollo del sistema internacional de Bretton Woods, sus instituciones y políticas, respecto a las cuales la situación española fue casi permanentemente de exclusión. El curso se cerró con la conferencia de Guillermo de la Dehesa, presidente del Center for Economic Policy Research, quien analizó en su intervención la crisis de deuda soberana en la que nos hallamos inmersos, prescribiendo como la única y casi inevitable terapia una mayor integración política, económica y fiscal en el seno de la Europa del euro.
Los resultados y conclusiones del curso “Las crisis económicas en la historia de España” serán publicados próximamente por la Universidad de Cantabria en colaboración con la Fundación UCEIF y el Archivo Histórico Banco Santander.